Clasificación de las humedades
Las humedades se agrupan de acuerdo con su procedencia. Básicamente se reconocen cuatro tipos:

Si la falla es producto de una mala instalación de la cubierta o impermeabilización de las terrazas, existe una responsabilidad de la empresa constructora y de los profesionales que asesoraron la construcción, por un plazo de 5 años desde la recepción municipal de ellas.

Las causas que provocan la infiltracion por los muros son el desgaste y envejecimiento de los materiales de acabado, como los revoques y los revestimientos de pintura, capaces de provocar un erosionado superficial.
Ascendentes por capilaridad, cuando suben desde el subsuelo. Descendentes por gravedad, si bajan por gravedad desde la cubierta o el terrado. Laterales por infiltración, motivadas por la lluvia que azota las fachadas. Condensación, causadas por la presencia del vapor de agua contenido en el aire.

LLUVIA INFILTRACIÓN

Humedad por capilaridad
Las humedades ascendentes por capilaridad provienen del subsuelo, debido a un exceso de agua en el terreno donde están afianzados los cimientos del edificio, aunque también pueden originarse en encharcamientos o saturaciones de agua, sea por la existencia de corrientes subterráneas de agua o por la caída de lluvias intensas, sin que tengan buen escurrimiento alrededor de edificio. El agua puesta en contacto con los muros del edificio penetra en ellos y por capilaridad asciende a las plantas superiores, dada la falta de impermeabilización de los cimientos y muros.

Humedad por gravedad

La humedad por gravedad tiene su origen en defectos de impermeabilización de las cubiertas del edificio, en donde pueden formarse pequeños embalses como consecuencia de lluvias intensas, sobre todo cuando existen defectos en el sistema de evacuación de las aguas pluviales. El agua retenida, antes de secarse por el aire y la acción solar, puede filtrar una parte a través de fisuras y pequeñas grietas, por donde conecta con la red capilar de la estructura y desciende a los pisos inmediatos. En otras circunstancias las vías de acceso son lo suficientemente importantes como para permitir que el agua caiga directamente, sin necesidad de recurrir a la capilaridad. Este
es el caso de las goteras, cuya presencia indica la existencia de fallos en las cubiertas.

Humedad lateral por infiltración

Originada por la lluvia que bate las fachadas de un edificio, todas las plantas de éste pueden verse afectadas por la aparición de humedades en los paramentos interiores correspondientes a los muros. Esta infiltración es causada por la ausencia de impermeabilización o la degradación de la capa impermeabilizante, sea por haber sido mal aplicada, por el uso de materiales deficientes o por las condiciones de la propia obra.

Humedad por condensación

La condensación se produce por la comunicación permanente de los ambientes externos1, con los internos del edificio, establecida por intermedio de la porosidad que tienen los materiales con que fue construida su estructura, los muros y las cubiertas, cuyo contacto busca alcanzar el equilibrio higrométrico entre ambos factores. Por otra parte, también los ambientes interiores pueden generar su propia humedad de condensación, generalmente como consecuencia de una ventilación deficiente. El fenómeno es tanto más acusado cuando el recinto es pequeño y no dispone de un volumen mínimo para absorber las aportaciones de vapor de agua de la transpiración y la respiración humana, así como las procedentes de las plantas de interiores, calefacción a parafina o gas de llama directa o catalítica, etc., es común en baños, cocinas y lavaderos mal ventilados.